La lección de Villavicencio: el gran éxito de Uribe vs. la izquierda mundial

5 01 2008

Álvaro Uribe se ha anotado uno de los más grandes y trascendentales éxitos de su brillante carrera política: ha acorralado política y militarmente a las FARC, ha desenmascarado ante el mundo su naturaleza criminal, asesina y mentirosa y ha empujado a Hugo Chávez y a todos sus aliados bolivarianos –Fidel Castro, Evo Morales, Rafael Correa, Lula da Silva y el matrimonio Kirchner Fernández, entre otros – al más completo y vergonzante ridículo. Suficientemente adobado por las escatológicas y hamponiles declaraciones de la Sra. Bonafini. Ridículo del que ni siquiera se salva el presidente Sarkozy, que ha demostrado escasa perspicacia en el trato con la criminalidad política latinoamericana. Y un parisino Comité Ingrid Betancourt, que sin entender un rábano de qué va la política en esta región se permitió sentirse asqueado por las FARC y Uribe, metiendo en un mismo saco a víctimas y victimarios.

Dios, bien dice el refrán, ciega a quienes quiere perder. La izquierda latinoamericana y mundial, aprisionada en sus mitos y lugares comunes, en sus prejuicios ancestrales y sus maniqueísmos seculares, se ha permitido coquetear con un teniente coronel de igual o peor calaña que el teniente coronel Tejero, ese impresentable militarote español que pretendiera un golpe de estado en febrero de 1981. Se ha negado durante nueve años a darle la más mínima credibilidad al angustioso reclamo de la oposición democrática venezolana, incumpliendo incluso su responsabilidad ante viejas deudas: ¿no fue esa oposición, cuando fuera gobierno, la que auxilió a Felipe González y los socialistas españoles para que luchara contra Franco, contribuyendo de manera esencial al restablecimiento de la democracia española? ¿No fue esta misma oposición, atropellada de manera vil y totalitaria en sus más elementales derechos por este “nuevo líder de la izquierda mundial” la que recogiera a las decenas de miles de náufragos de las dictaduras del Cono Sur?

¿Cómo han respondido los izquierdistas chilenos, argentinos, uruguayos a los llamados de auxilio de sus congéneres venezolanos? Con un portazo en las narices. Instalados en los gobiernos de sus respectivos países, en gran medida gracias al auxilio de la socialdemocracia y el socialcristianismo venezolanos – desde hace nueve años en la oposición – han corrido a respaldar a un teniente coronel de claras ínfulas totalitarias, enceguecidos por sus maletines de dólares y sus compras milmillonarias. ¿Qué ha hecho la izquierda española? Respaldar a quien violaba nuestra democracia, mientras cerraba los ojos ante la tragedia cubana. ¿Qué hace Kirchner? Escupir sobre la democracia venezolana. ¿Qué ha hecho Insulza? Barnizar de democratismo un régimen dictatorial.

Todos ellos, desde Kirchner y la Sra. Fernández hasta Lula da Silva, arrastrando en la comparsa incluso a Rodríguez Zapatero y Sarkozy, han sido enfrentados a la cruda, a la aterrante realidad: las FARC, brazo armado de la revolución bolivariana, asesinan, secuestran, torturan, aterran y mienten. Incluso a sus más dilectos aliados. Y Chávez, que montó este circo para cosechar un éxito diplomático para él y sus aliados de las narco guerrilas, no es más que un payaso irresponsable provisto de una suculenta chequera. Que malversa en provecho de sus delirantes sueños de grandeza.

Merecido lo tienen. Esta es la izquierda. Que asuma sus responsabilidades.

LA IZQUIERDA MUNDIAL Y LA LECCIÓN DE VILLAVICENCIO

Antonio Sánchez García

Noticias24





Muérete Emmanuel

3 01 2008

La segunda parte del show montado por Chávez y sus amigos de las Farc: terminó. Alguien que juega con los sentimientos y el sufrimiento de los secuestrados, no sólo es un cínico y miserable sino que es un ser más perverso que los paramilitares y las guerrillas colombianas juntas, ese único ser macabro es Chávez.

Atrabilioso ya lo había dicho; » Chávez es un secuestrador, también» y no se equivocó. El circo montado por Chávez desde el 18 de diciembre después que se conociera la noticia del «desagravio» de las Farc con Chávez, después de su fracasada mediación y legitimación del terrorismo, terminó en un peor agravio y una bofetada al mundo entero tal como lo resalta el Mundo de España y otros diarios de importancia del país ibérico.

 
Se le aceptó de todo al dictador socialista: Que hiciera un plan sin consultarlo al gobierno colombiano, que violara nuestra soberanía con sus helicópteros (así a lo último llevaran una estampa de la Cruz Roja Internacional), que trajera a los representantes de países títeres de sus petrodólares y «antoninis». Nada de esto bastó. El dictador de Barinas, la Córdoba y las Farc jugaron otra vez con los secuestrados (45 en total, o al menos eso dicen los medios) y quedaron en evidencia ante el mundo. El teatro de Chávez cayó al sueño gracias a sus compinches matones de las Farc.

Pero las cosas estaban destinadas al fracaso y eventualmente fracasó todo; y como desagravio próximo las Farc deben liberar como mínimo a los tres que prometieron y a Íngrid Betancourt. No bastó con que todas sus exigencias se cumplieran sino que además trató de manera rústica y torpe (como ya nos tiene acostumbrados a los caribeños predecibles como dice el represidente argentino que no es presidente) de excusar la demora en la entrega de los secuestrados: Que los bombardeos, que el clima, que el perro, que el gato y demás explicaciones absurdas, ridículas y mentirosas para justificar lo que ya se sabía: Las Farc volvieron a mentir y Chávez quedó damnificado.

La macabra, ruin y trágica historia sobre de que Emmanuel estaría en manos del ICBF y su historia clínica demuestra nuevamente el sadismo y la mitomanía de las Farc y esta vez con un ser de escasa edad al cual le jodieron la vida de por vida sin vivirla.

De Chávez y las Farc nos podemos esperar cualquier cosa, asesinar y secuestrar es fácil para ellos. El asesino de Chávez confía más en un grupo de matones y secuestrador que en el presidente legítimamente elegido y con la victoria más amplia en la historia de Colombia desde las épocas de López Pumarejo.

Es obvio que el gran perdedor es Chávez, a pesar desde que comenzó la «Operación Emmanuel» (abusando de manera miserable del secuestro de un niño para darse un baño mediático) Uribe salía perdedor, este último terminó recuperando su protagonismo y poniendo las cosas en su sitio como debió ser desde sus inicios. No sólo desenmascaró las farsa de las farc ep (Ejército del Polo) y de Chávez y demás perros falderos, sino que además lanzó una hipótesis sobre Emmanuel que terminó por terminar lo que las Farc terminaron con su «suspensión» y por no haber dado las coordenadas del show.

Este aparte es importante: «No han faltado analistas para quienes el show montado alrededor de la anunciada liberación de apenas tres de las aproximadamente 750 personas que las FARC mantienen cautivas estuvo dirigido a debilitar al presidente colombiano, Alvaro Uribe, tanto en el nivel local como en el ambiente internacional. «

Y mucho más valioso y contundente son los artículos de Fernando Londoño sobre el tema: El tinglado de la farsa y El burlador burlado.

Tal como lo dijo el delegado de la fracasada «Operación Emmanuel» esta operación solo dependía de que las Farc dieran las coordenadas, lo demás son pataleos del matón de Barinas para tratar de salvar en algo su fracasada operación. Eso de que Uribe «dinamitó» la operación, solo es un cuento rebuscado que solo se creen los criminales amigos de él y los borrablogs de equinoXio (alias los sicarios morales).

Eso de insultar a Uribe es una muestra más de la poca educación que tiene el mico-mandante asesino y secuestrador a quien se le acabó su show mediático. Lo mejor del asunto es que se conoció que el mapa que usó para elaborar su fracasada «Operación Emmanuel» no tenía fronteras: Una muestra más de que el mico se cree el emperador de la Gran Colombia.

Para rematar con la voluntad de paz de las Farc, alias Tirofijo anunció una arremetida militar contra Colombia en el 2008.

¿Y el título de la entrada por qué? En realidad es Muérete Manuel Marulanda.